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La responsabilidad social se define como el compromiso voluntario de las empresas para contribuir con el mejoramiento social, económico y ambiental. Esto, aparte de generar beneficios a los agentes implicados, también mejora su competitividad, prestigio y valor añadido. Esta condición va más allá de las normativas o requerimientos legales, ya que demandan un compromiso ético, de conciencia ambiental y social, y de comunicación en todos los niveles de la organización.

La protección del medio ambiente, ayuda y desarrollo de comunidades socialmente vulnerables, protección de las riquezas naturales y culturales de una población, incentivos a los trabajadores, prohibición y denuncia de situaciones indeseables como: trabajo infantil, mujeres embarazadas, esclavitud, son ejemplos de responsabilidad social empresarial.

Igualmente, la selección de la cadena de suministro que tenga conciencia social, la selección de materias primas compatibles con el ambiente y la seguridad que estas no provienen de empresas que incumplan normativas laborales forman parte de este sistema. A nivel internacional, ISO 26000 son un conjunto de guías que establecen líneas en materia de Responsabilidad Social establecidas por la Organización Internacional de Normalización (ISO).

Por lo tanto, si este tema le resulta de su interés, y quiere asesoría o consultoría en implantación de una normativa basada en responsabilidad social, lo invitamos a contactarnos.

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